No podemos dejar niños solos con perros: veterinaria Martha

Video | Así lo explicó a detalle en entrevista Martha Domínguez.

Hablando en entrevista para tiempo.com.mx y puentelibre.mx sobre los perros como compañía de los hogares, expuso que es importante entender qué es lo que hace el humano, pues el hecho de que el animal sea agresivo o no, o defensivo, depende mucho del trato que reciba de los humanos.

Parte de ello es entender la interacción que tienen sobre todo con los niños, pues son quienes más riesgo corren de ser mordidos porque para los canes, son “un perro más” y no los ven como humanos como tal.

También pidió no dejarse en engañar por decir que son “perros niñera” los pitbulls, son animales que provienen del lobo y en su instinto está la capacidad de morder, que puede ocurrir tarde que temprano si se les molesta, si no se les da un trato adecuado.

Cómo evitar mordida del perro.

“Es como tú lo críes. Acabo de ver video donde el dueño le dice a la vecina ‘no le hagas confianza a mi perro’. Ya lo tenía dentro. Obviamente él sabía que había un trasfondo del pueblo, casi la mató. Hubo una discordancia de algo, volteó el perro, le mordió la cara, le arrancó la oreja. Hecha garras la muchacha”.

“Acordémonos que los perros descienden de los lobos, el que sea, siempre va a salir el lado salvaje. Dicen ‘no muerde’, sí muerde", incluso si parecen inofensivos "me han tocado muchos cocker spaniel que muerden a niños. Hay que ver las dos partes”.

“Si un niño convivía con ese perro y lo molestaba, obviamente lo va a morder, hay que respetar. En eso entramos los papás, si el perro hace cara de ‘no me toques’... te está avisando con signos, te avisa la pata, la oreja, la cola, la cara. Te hace ‘hazte para allá’”.

“Siempre les digo a mis empleados ‘cuidado con ese perro’, ¿por qué? ‘te va a morder’. Es etología (estudio del comportamiento animal) canina, hay que aprender a leer el lenguaje canino, no me preguntes donde lo aprendí, siempre tuve ese feeling para decir ‘aguas, te va a morder’. Y es más fácil que te muerda un perro chico que uno grande”.

“Sí me han mordido los K9, las dos veces que me han mordido fue culpa del manejador. Se entrena primero al humano. Los perros llegan contentos a la clínica, el perro no llega estresado”.

“Todas las razas tienen su personalidad bien definida, hay que conocerlo. Yo prefiero un pastor belga, a lo mejor tú un french poodle. Ya sabes cómo se va a manejar, siempre la has tenido toda tu vida, un cocker o springer”.

“Siempre tuve dálmatas, eran maravillosos. Ojo, tenían su carácter. Algo no le gustaba, te mostraba los dientes” y avisaba que podía morder.

“Por qué lo mordió el perro, tiene que haber algo, algo pasó. ¿Dónde termina el perro? En el antirrábico dormido”.

Ven a los niños como perros.

“Los perros ven a los niños como otro perro, no como niños. A veces no podemos dejar a los niños con los perros solos”.

“Dicen ‘es una niñera’, ‘sí, pero no sabes’. No hay nada escrito en eso, el comportamiento animal varía”.

“Me ha tocado ver un pitbull y un bebé encima de él dormido y dicen ‘es una cosa tiernísima, me encanta, muero de amor’. Pero, qué hace el niño. El perro ahí está y dice ‘oye me está jalando’, hay perros tolerantes pero no todos son iguales, o no tienen igual la misma tolerancia”.

Se salió ojo de un pug.

“Antier me llegó un pug con un ojo de fuera. Un bebé, pug de dos meses y medio. Venía el niño y la muchacha, le digo al niño ‘mi rey, ¿qué le pasó, te acuerdas? Es que yo lo saqué y entró así. Le vi la mirada, el niño se estaba muriendo del susto, cree que lo voy a regañar.

Se sale el niño, duermo al perro para acomodar el ojo y le digo (a la joven) ‘sí fue el niño’ y ella ‘sí, sí fue el niño’. Bueno vamos a arreglarle el ojo, no pasa nada, estos perros son más delicados de esta área”.

“Fue un golpe sin querer, un balonazo y ¡pum!, el ojo de fuera. No pasa nada, fue un accidente. Digo vamos a arreglar el ojo, a lo mejor otro dice vamos a quitarle el ojo”.

“Vamos a hacer lo posible para no traumar al niño y va a decir el niño ‘la doctora le quitó el ojo, no sirve’. Vamos a guardar el ojo, a cerrarlo unos días y a ver cómo va evolucionando.

No le eché la culpa al niño pero yo sabía que él había sido, al día siguiente la mamá me dijo. Hay que tener ese 50-50 con la gente, no es adrede”.