El tiempo por Tutiempo.net
El tiempo por Tutiempo.net

Robaron cuerpos de jesuitas; exige Compañía de Jesús justicia

Los Jesuitas de México condenaron el homicidio de dos sacerdotes jesuitas en la comunidad de Cerocahui en el municipio de Urique y exigieron a las autoridades justicia y se recupere los cuerpos de los presbíteros, los cuales fueron sustraídos por sujetos armados.

Por: Redacción 21 Junio 2022 07 43

A través de un posicionamiento público, La Compañía de Jesús demandó que se adopten medidas de protección para todos los habitantes de la comunidad de Cerocahui.

Destacaron que estos hechos, no son aislados, pues la Sierra Tarahumara así como otras regiones del país enfrenta condiciones de violencia y olvido que no han sido revertidas.

Aquí posicionamiento de La Provincia Mexicana de la Compañía de Jesús:

Los jesuitas de México, con profundo dolor, denunciamos el homicidio de nuestros hermanos Javier Campos Morales, S.J. y Joaquín César Mora Salazar, S.J., ocurrido el día de ayer dentro del templo de la comunidad de Cerocahui, Chihuahua.

Condenamos estos hechos violentos, exigimos justicia y la recuperación de los cuerpos de nuestros hermanos que fueron sustraídos del templo por personas armadas.

También demandamos que de forma inmediata se adopten todas las medidas de protección para salvaguardar la vida de nuestros hermanos jesuitas, religiosas, laicos y de toda la comunidad de Cerocahui.

Hechos como estos no son aislados. La sierra tarahumara, como muchas otras regiones del país, enfrenta condiciones de violencia y olvido que no han sido revertidas. Todos los días hombres y mujeres son privados arbitrariamente de la vida, como hoy fueron asesinados nuestros hermanos.

Los jesuitas de México no callaremos ante la realidad que lacera a toda la sociedad. Seguiremos presentes y trabajando por la misión de justicia, reconciliación y paz, a través de nuestras obras pastorales, educativas y sociales.

Al denunciar lo ocurrido hacemos notar también el dolor que vive nuestro pueblo por la violencia imperante y nos solidarizamos con tantas personas que padecen esta misma situación, sin que su sufrimiento suscite empatía y atención pública.

Confiamos que los testimonios de vida cristiana de nuestros queridos Javier y Joaquín sigan inspirando a hombres y mujeres a entregarse en el servicio a los más desprotegidos.

Descansen en paz.


Las Más Leídas