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Sobrevivió bebita a aborto; décadas después se reencontró con su madre

Melissa Ohden, sobreviviente de un aborto, quien fue abandonada como “desecho médico”, contó su historia y cómo fue el emotivo reencuentro con su madre, a quien perdonó e incluso ve como una segunda víctima.

Por: Redacción 27 Junio 2020 14 59

La mujer de 42 años, de Kansas City (Missouri, Estados Unidos), habló recientemente para el medio británico The Sun, donde contó cómo después de casi cuatro décadas conoció a su madre biológica, Ruth, quien no sabía que su hija sobrevivió al aborto.

Durante su infancia, Melissa -'Missy' como la conocen de cariño- tuvo una vida feliz con sus padres adoptivos. Siempre supo que no era su hija biológica, pero pensaba que su madre natural quedó embarazada cuando era universitaria y por ello la dio en adopción.

A los 14 años, escuchó de su hermana adoptiva -en medio de una discusión- la frase “hija deseada”, lo que despertó dudas en la joven.

Finalmente la madre adoptiva le explicó que sobrevivió a un aborto que fracasó, gracias a que dos enfermeras la llevaron a una unidad de cuidados intensivos.

 

El aborto.

Ruth, la mamá biológica, fue presionada cuando tenía 19 años por su propia madre, una enfermera, para que abortara a Melissa.

La propia Ruth, en el séptimo mes de gestación, no quería practicarse el aborto pero la señora presionó.

Narró Melissa: “ella (Ruth) fue coaccionada por su -hoy fallecida- madre a abortar. 19 años, ella no quería eso. Ella pensó que el aborto resultó y cuando no fue así, pues nací con vida, su madre le dijo al equipo de médicos que yo era desecho médico y que me metieran (entre los desperdicios)”.

Cuando la mujer realizó el aborto de su propia nieta, la tiró como “desecho médico”, pero “dos enfermeras se encargaron y me salvaron”.

Missy de bebé.

Missy, pictured as a baby

“Fui llevada a cuidados intensivos prenatales y sorprendentemente sobreviví”.

La bebita nació y finalmente fue adoptada por una familia que le dio amor y cuidado.

Melissa confiesa que sufrió un duro golpe emocional al enterarse, incluso se refugió en el alcohol por un tiempo.

 

El reencuentro.

En 1997, cuando tenía Melissa 19 años, se propuso a encontrar a sus padres biológicos.

Diez años después, en 2007, Ruth se enteró de la verdad: su hija estaba viva. Pero no se atrevió a contactarla.

Ese año descubrió quién era su padre biológico, le envió una carta. Pero él había muerto poco antes y ella se enteró. Eso sí, la misiva le permitió conocer a su abuelo paterno, con quien tuvo una buena relación.

Después conoció los nombres de sus abuelos maternos. A raíz de eso, en 2013 recibió una llamada de una prima de Ruth, quien sabía de la historia, y ofreció comunicarlas.

Entablaron comunicación Melissa y su mamá Ruth. Se trataron a distancia y en el 2016 se reunieron en un zoológico de Kansas City, finalmente, tras décadas de búsqueda.

Tan pronto nos vimos, nos abrazamos”, recuerda Ohden en la entrevista.

 

Ayuda a sobrevivientes de abortos.

“Ella (Ruth) dijo: ‘nunca pude sostenerte’. Ahora nos vemos todo el tiempo”, afirmó Melissa.

Encontraron que tienes muchos parecidos, no sólo características físicas, como cierta empatía y preocupación por los otros.

Hoy en día Melissa Ohden dirige la agrupación ‘Abortion Survivors’ Network’ (“red de sobrevivientes del aborto”, en español).

Es una importante vocera de la causa contra el aborto y para ayudar a aquellas personas que han sobrevivido a la pretensión de dar muerte a hijos en el vientre materno.

 

“Hay preguntas sin resolver para ambas, pero sabemos que a pesar de que fui un intento de víctima en ese aborto, ella fue una segunda víctima”.

“Y las dos continuamos decidir levantarnos, en vez de ser victimizadas. Escogemos prosperar, vivir, amar, perdonar, aportar algo a este mundo”.

Tres años antes de esta entrevista que hizo eco internacional, Melissa había hablado para medios donde comentó que “ahora sé que mi abuela quería cambiar mi destino para que no estuviera en este mundo. Por algún motivo, mi nacimiento y mi adopción fue un secreto para todo el mundo”.

“Pero yo estoy harta de permanecer en secreto. Quiero contar mi historia para ayudar a salvar a millones de bebés que son abortados cada año. Quiero ayudar a las madres a que tomen la decisión de apostar por la vida de sus hijos”, expresó Melissa.


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