CRONOS POLÍTICO

CON UN MES de trabajo como nuevo consejero de la Judicatura, Abelardo “El Bayo” Valenzuela puede decir sin despeinarse servida la whole enchilada.

¿Algo más? 

Unos burritos, plato de menudo, sincronizadas, tacos de barbacoa angus...

Tenía la difícil encomienda de entrar al poder judicial y tomar el control del Tribunal que, en sus entrañas administrativas, seguía bajo el corralismo y los intereses personales que son muchos.

Maru Campos envió al Bayo quien realizó la operación con César Jáuregui y Luis Villegas, y bueno tampoco salieron ilesos, porque se les quemaron dos que tres tortillitas en el aceite.

Los cambios y movimientos en el tablero de ajedrez, llevaron a la renuncia de Pablo Héctor González, anunciada la semana pasada y a quien le habían dicho que seguiría en el cargo.

Pero el jaque mate terminó ayer con la renuncia del magistrado Roberto Siqueiros, en el Consejo de la Judicatura.

La salida de Siqueiros es el golpe más seco al corralismo y a Lucha Castro en los cambios en el poder judicial, y es que el magistrado se dejó caer con todo el poder que tenía el respaldo de palacio, sus decisiones eran intocables en Juárez.

Está CONFIRMADO que el viernes será electa Myriam Hernández Acosta como nueva presidente del Tribunal Superior de Justicia para terminar el periodo de un año y ocho meses que restaba al expresidente.

Que acuerdo está planchadísimo.

Pablo Héctor González, regresará a su sala con el compromiso que permanecerá ahí sin problemas.

Finalmente nombrarán a dos magistrados como nuevos integrantes del Consejo de la Judicatura para el control total del personal. 

Van por cinco de cinco

Conseguir la judicatura no es cosa menor, viene el tema de los 54 jueces, la gran mayoría serán reventados por no cumplir con los requisitos de selección.

Se trata de tumbar el procedimiento, ni siquiera discutir la ratificación o no.

Ese será el próximo tiro.

PARECE QUE en la 4T tiene interés en fichar al Ex César Duarte para que la Fiscalía General de la República de Alejandro Gertz Manero aplique el método científico de investigación criminal.

Que raro... que salieran en nado sincronizado la senadora Bertha Caraveo, y el diputado Cuauhtémoc El Jeep Estrada, a pedir que Duarte sea juzgado en la CDMX y no en Chihuahua.

De cuando acá tan preocupados por el problema de la competencia y jurisdicción en los juicios del exgobernador.

Jurídicamente es posible, la solicitud de extradición tiene una investigación de la FGR y con eso pueden aguantar la risa y no mandarlo a Saint William Resort. Sin contar que la Fiscalía General de la República dispone de facultades de atracción muy amplias.

Pero para que el lagartón de Pablo Gómez Álvarez, nuevo titular de la UIF, amiguísimo cercano de AMLO e izquierdista a morir, soltara que Duarte tiene cosas nuevas pendientes que anda investigando la Unidad de Inteligencia Financiera, a parte los procesos en curso… pues, ya va diciendo la cosa.

Habrá que esperar, pero parece que algo hay.

ES MAS, INCLUSO trascendio desde CDMX que no descartan que la FGR intentaría un convenio, fáctico o expreso, para que fuera sujeto al criterio de oportunidad.

Como el caso Lozoya está patinando, Duarte podría dar el refuerzo, sobre todo para echarle un ojo a Luis Videgaray, ya saben que es el más buscado por la 4T, lo quieren en el Reclusorio Norte, con pase premier all you can eat.

Sin embargo quién sabe si Duarte quiera hacerle al sapito, es entrón y sabe que la lealtad se paga o se cobra caro.

Pero en la mesa estaría esa opción, sin duda.

LA PRELIBERACIÓN del líder agricultor Andrés Valles, de la zona de riego de Delicias, será un hueso duro de roer.

El acuerdo firmado por la gobernadora Maru Campos con Adán Augusto López, Secretario de Gobernación, sigue en stand by, no logró concretarse ayer en la audiencia que tuvo el detenido, menos en la siguiente semana que se publicó.

Autoridades estatales y la familia del propio Andrés Valles mantienen la postura de confiar en el compromiso del gobierno federal. Pero cómo cumplir algo que está en manos del Poder Judicial.

Si este caso está complicado, aún más el de los tres agricultores detenidos con granadas de gas lacrimógenos y acusados de terrorismo.