Posverdad

Cruz Pérez Cuéllar aprovecho su inclusión en la lista de los “300 líderes más influyentes de México”, para fortalecer su red de contactos con miras al 2027.

Durante la comida en el Centro Bancomer Santa Fe, no pasó desapercibido que el alcalde de Ciudad Juárez se movió estratégicamente entre los pesos pesados de la política y el empresariado mexicano.

Entre las fotos que compartió en redes y que generaron más ruido, están las que se tomó con Clara Brugada, la jefa de gobierno capitalina; Luis Donaldo Colosio Riojas, la joven promesa política en Monterrey; y empresarios de la talla de Carlos Slim, Daniel Servitje y Germán Larrea. Esos contactos le son cruciales para futuras alianzas, especialmente si se considera que todos ellos tienen un peso significativo en sus respectivos territorios y sectores.

Pérez Cuéllar, quien ya ha mostrado su intención de competir por la gubernatura de Chihuahua, se codea con personajes que también tienen en la mira posiciones clave en el país.

Es claro que este tipo de eventos son más que una simple reunión social; son el escenario perfecto para mover piezas en el tablero político y, sin duda, el alcalde juarense está jugando a largo plazo, consolidando su camino hacia el 2027. 

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La sorpresa del día en el Senado vino con la licencia de Juan Carlos Loera, quien al parecer tomó a más de uno con la guardia baja. 

Aunque los rumores volaron rápido, especulando sobre su posible integración al equipo de Claudia Sheinbaum, la realidad parece ser mucho más personal: Loera se prepara para su boda. 

Claro que en Morena no sobra ni un voto, menos con la Reforma Judicial en el horno. Así que el suplente, Luis Mario Baeza Cano, entrará al quite. Baeza, quien ha sido presidente del CCE y CMIC en Juárez, ya tiene algo de experiencia, pues no es su primer rodeo en la política.

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En el ámbito económico, el súper peso ya dejó de ser tan "súper". Tras haber coqueteado con los 16.50 pesos por dólar hace apenas unos meses, hoy la moneda mexicana enfrenta su mayor depreciación en 2024, con una caída del 18%. Lo curioso es que acaba de superar a la moneda argentina en esa carrera hacia abajo, y uno puede imaginar a Milei sonriendo con su usual irreverencia.

El último golpe vino desde la Cámara de Diputados, que aprobó la Reforma Judicial, lo que aún debe pasar por el Senado. Entre tanto, el peso sigue cayendo víctima de la especulación.

A pesar de la euforia morenista liderada por Ricardo Monreal, a quien le recuerdan sus tuits críticos contra las reformas apresuradas, la diputada chihuahuense Manque Granados ya había advertido que este día sería recordado como el momento en que el dólar se disparó y las inversiones comenzaron a huir.

Por lo pronto, el tipo de cambio ya está pagando los platos rotos, y aunque la caída es dura, viene desde un pico alto, lo que hace el desplome más visible y doloroso. Veremos si la 4T logra surfear esta tormenta económica.