Cerveceros toman la cima de Grandes Ligas con su undécima victoria

El gran impulso comenzó el 6 de julio, cuando Brandon Woodruff volvió a la rotación después de una larga ausencia por cirugía en el hombro. Desde ese día, Milwaukee no ha perdido. El veterano abridor ha sido pieza clave en este resurgimiento, dando profundidad y solidez a una rotación que necesitaba liderazgo.

Ante Seattle, Woodruff y dos relevistas firmaron una blanqueada combinada, pero no fue fácil desde el arranque. George Kirby los tuvo sin hit durante cinco entradas, pero en la sexta Milwaukee rompió el silencio con racimo de cuatro carreras que marcó el rumbo definitivo.

El resto fue una demostración de cómo este equipo se ha transformado en una máquina de ganar: paciencia al bat, solidez en el bullpen y defensa oportuna. Cada victoria ha sido construida desde el orden y la ejecución.

Con la derrota de los Cachorros y los Tigres, Milwaukee se convierte en el nuevo líder absoluto de Grandes Ligas tras 100 partidos disputados. Nadie ha ganado más ni luce tan enrachado en este momento del calendario.

Si los Cerveceros siguen jugando a este nivel, no solo dominarán su división, sino que serán uno de los rivales más temidos rumbo a octubre.