Cruz Azul, sin descerebrados que van a fiesta antes de jugar: Jémez

En México la mayoría de los equipos tienen concentraciones un día antes del partido a fin de mantenerlos lejos de excesos y pensando sólo en el juego.

Por lo contrario, Paco Jémez, director técnico de la Máquina, los citó hasta el día del partido contra Necaxa.

Para ello explicó que “tengo grandes profesionales, doy la cara por mis jugadores, confío en ellos. Si hay alguno que no me responda a la confianza, sé lo que tengo qué hacer. El tema de las concentraciones lo hablo con ellos. Lo que quiero es que se encuentren lo más cómodo posible”.

Agregó, “fui jugador y sé que lo más cómodo es estar en tu casa con tu familia. Sé que van a comer bien, descansar bien. Creo que no tengo ningún descerebrado en el equipo al que se le ocurra un día antes del partido irse de fiesta. Veo a mis jugadores a la cara en los entrenamientos y puedo confiar en ellos”.

Sobre el destino del Cruz Azul y sus 19 años sin título, comentó que no piensa batallar o gastar energía “en algo que no tiene arreglo, que es del pasado”.

“El pasado del Cruz Azul es el que es y a mi me han traído para intentar forjar el presente, mejorar al equipo. Lo mejor que traigo es que me presiona poco lo que pasó antes, miro al futuro, miro el presente. Quiero de hacer al Cruz Azul un equipo mejor. Es verdad que hay que cambiar la mentalidad y les dije que sólo vean el futuro. Creo que a los jugadores les gustó mi forma de ver, porque ellos estaban cansados de que les recordaran lo que había pasado antes a cada rato”, dijo Jémez.

Tras la victoria en el estadio Azul, agradeció a la afición y a los jugadores, dijo, “les pongo una nota alta a mis jugadores, los felicito, porque para el primer partido se me hizo un buen trabajo, pero yo necesito más”.